Y disfrutar.

Ella, confundida entre apariencias y detalles no lo quiso dudar más y acudió al lugar donde se juntarían, en ese momento se sentía nerviosa, quizás ansiosa, pero sólo quería estar en la casa de él y ver que pasaría.
Todo marchó excelente, mejor de lo que esperaba, no tenía grandes expectativas del almuerzo ( sin discriminar, pero que un hombre cocine bien es difícil encontrar ) y llegó ese momento, donde tenía que ver que es lo que pasaría cuando ya no hay que conversar tanto.
Él, impulsivamente se acercó a sus labios y ella sin pensarlo respondió el beso, un beso que diría muchas cosas, sacaría a la luz sensaciones escondidas en vasos, daría certeza y más allá de eso, dió seguridad.

- Espera, pero ¿qué vas a hacer ahora entonces?

Creo que ahora diré " ahora " porque siento que las personas no están aseguradas para nosotros, se pueden marchar mañana, puede acabar esto en una semana y lo más apropiado que puedo hacer es sólo disfrutar de lo bien que me hace sentir y comenzar a llenarme de momentos, mientras no me hagan daño ( no me hagas daño ).
Y bueno, quizás el próximo mes sean otras manos y otras caricias las que me hagan vibrar.
Hoy salto, bailo y río mientras puedo.